Hace pocas horas el Consejo Nacional del Partido Justicialista anunció formalmente que iba a formar un «gabinete paralelo», para hacer un seguimiento de la gestión del presidente Macri.
Los principales dirigentes del PJ lo mencionaron como una instancia que analizará cada una de las políticas que implementará el gobierno nacional, y estará integrado por especialistas que evaluarán la gestión macrista en economía, defensa, relaciones exteriores, cuestiones energéticas, transporte, seguridad, salud y seguridad, entre otras.
Estuvieron presentes Daniel Scioli, Lucía Corpacci, Leonardo Nardini, Antonio Caló, Roxana Bertone, Sergio Uñac, Carlos Verna, José Alperovich, Guillermo Moreno, Gustavo Bordet, Gildo Insfrán, Andrés Rodríguez y Juan Manuel Abal Medina, entre otros. Y cada una de las intervenciones de los que hablaron tuvo un marcado tenor opositor y crítico con respecto al primer semestre de la presidencia de Macri.
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«La mano viene fea. Nosotros no podemos apoyar el que se vayan todos, pero debemos convocar a todos los sectores para frenar a este Gobierno insensible«, señaló el ex gobernador de Entre Ríos Sergio Urribarri, uno de los oradores.
Pero… hasta ahora, el único especialista que se menciona en la nota que se preparó para Telam es Ginés González García, en Salud, haciendo hincapié en los aumentos de los casos de dengue y gripe A. El gordo es respetado por todos: largas trayectorias en el peronismo y en la medicina, actualmente Rector Honorario de la Universidad ISALUD, y, como Ministro del área, uno de los muy pocos que se animó a promover los medicamentos genéricos, para fastidio de los laboratorios.
El problema es que, antes de poner a trabajar a los especialistas, el Consejo debe distribuir sus secretarías entre los políticos. Y los nombres que aparecen -por ejemplo, en esta nota de Clarín hecha con toda mala intención- son los de Juan Manuel Urtubey, Miguel Angel Pichetto, Omar Perotti… Del ala que la mayoría de los militantes ve como Macri-friendly, o filo Tinelli, del PJ.
En mi opinión, la «grieta» interna del peronismo es por ahora inevitable. La militancia -de la cual una parte no menor ha perdido el laburo o tiene amigos en esa situación- no acepta, no puede aceptar, otra actitud que una oposición irreductible a este gobierno.
La actual dirigencia del PJ -Gioja, Scioli, en particular- aunque son conscientes de la necesidad de hacer gestos en esa dirección (reivindicar los retratos de Néstor y Cristina al lado de los de Perón y Evita, por ejemplo)- deben, en primer lugar, bancar las negociaciones que hacen a la gobernabilidad de provincias e intendentes en manos del peronismo. Esa es su base de poder.
Y su estrategia está dirigida a procurar una unidad «panperonista». Si no lo suman a Massa -su opción por afuera ya sería irreversible- impedir que Sergio sea el canal para el voto peronista «fastidiado con el kirchnerismo» que le dio el triunfo en Buenos Aires en 2013 y fue una parte de su cosecha en 2015. Lograr que Randazzo no se vaya, mantener adentro a Rodríguez Saá y a Verna, recuperar, quizás, a De la Sota y Schiaretti…
Los más lúcidos de este sector dicen que la forma de «detener» a Macri es derrotarlo en las elecciones, y que cualquier otra es una fantasía de café. Que cualquier combinación electoral que se haga en el futuro cercano tendrá como eje al peronismo o será un «partido del 10 %». Tienen un punto.
Ahora, hay un aspecto que no sé si han considerado a fondo. Sin subestimar el arrastre que tengan en algunas provincias sus gobernadores y sus aparatos, también quizás algunos intendentes, la mayoría, por lejos, de los votantes se definen en favor o en contra de un gobierno, en favor o en contra de un hombre o una mujer que, en ese momento, expresa lo que aman o lo que odian. Siempre es así. Si la actual dirigencia del PJ lo mantiene unido -no es fácil- habrá cumplido una tarea meritoria. Pero ese instrumento electoral será llevado a la victoria si expresa en sus candidaturas los sentimientos de una mayoría de los votantes. Me parece evidente que los que puedan votar al peronismo el año que viene son los que sientan mucha bronca con Macri y sus políticas.
El blog de Abel 
«Ginés González García…. es respetado por todos: largas trayectorias en el peronismo y en la medicina… uno de los muy pocos que se animó a promover los medicamentos genéricos, para fastidio de los laboratorios.» y probablemente de CFK quien pese a la excelente gestion del gordo en salud lo mandó de embajador a Chile. Tengamos memoria. Lo hechó a GGG le abrio las puertas a WalMart.
De acuerdo.
Los intendentes están comprando comida. Leche.
El punto de vista de la militancia se condice con el ánimo de la calle. El PJ está en una nube.
Rosana Bertone ¿Se ocupará de la cartera de Seguridad y Negociación con los manifestantes? Demostró decisión y firmeza.
Además de Ginés González García el otro ministro que desafió a los laboratorios fue Arturo Oñativia.
«Me parece evidente que los que puedan votar al peronismo el año que viene son los que sientan mucha bronca con Macri y sus políticas.»
Interesante Abel que lo que ayer criticaba como pobre motivo para votar al hoy partido gobernante sea el principal motivo para un voto peronista en las proximas elecciones.
Cosas vederes Sancho..
chamuyo, de que gobernabilidad hablan en un pais que en 6 meses paso de tener una economia funcionando a una recesion sostenida con el ahorro de los giles y cuya transferencia de ingresos hacia arriba genero la fuga de capitales mas grande de los ultimos 13 años.
necesitan especialistas estos payasos y a que se dedican ellos entonces, a comprar lebacs?
esta gente en los ultimos meses convirtio al peronismo en una version estupida del troskismo, los troskos estan en todo lados y en toda la red persiguiendo kirchneristas junto con el pro y estos disque peronistas jugando a la politica con el pro.
es increible que la inaccion sea la politica del peronsmo en oposicion y ahora hacen un comite de doctores por favor entre todos estos imbeciles maricas no juntan un huevo.
pero bueno cuando papa mañetto les diga ahi si.
total el hambre es de otro
También sería una opción la unidad de acción, es decir una interna abierta en las generales donde quien gane imponga sus políticas en un frente parlamentario.
Desde ya que quienes hoy dirigen el PJ sienten frío en la espalda por esta opción, porque saben que claramente representan la derrota, y que son muchos caciques con pocos indios, salvo tal vez los mas antiK de ese grupo, y el tal vez es por qué ante la vista de las política que representan, no muy lejanas de las instrumentadas por el botarate, es muy posible que no puedan presentarse como una opción, y me estoy refiriendo a Verna, Rodriguez Saá y el cordobesismo, a Urtubey y sus cómplices hoy los vería tan pegados al Gobierno Nacional por los mendrugos que están cayendo de la mesa que su futuro quedaría relegado a la localía, algo así como De La Sota.
A fuer de honesto, de todo ese grupete a lo único que veo con garantías y jugando de lo local en sus pagos, siguen siendo los Rodriguez Saá, y el único con vuelo nacional, dependiendo de como juegue sus cartas es Florencio.
Quien haya visto con atención las encuestas acerca de quienes apoyan el panperonismo, saben que nuestro grupo mas fuerte y activo está entre los menores de cuarenta, con los de hasta cincuenta y cinco en disputa, y entre esa gente la propaganda del botarate, de Prat Gay, Michetti y Gonzalez Fraga ha potenciado el contraste de políticas, que todos conocemos como posibles a pesar que quieran hacernos creer que hemos soñado, por eso la desesperación por meter presa y proscribir a Cristina de la pata judicial del trípode.
En mi opinión, excluir a los K, constituye el acta de defunción de una dirigencia compuesta de enanos con zancos, primero de las políticas nacionales instrumentadas durante los años que culminaron el 10 de diciembre, y ahora por el trípode cuya angurria los ha puesto entre la espada y la pared, dirigencia cuyo destino puede verse en el lamentable decaer del ala conservadora de la UCR, pero tomo su frase mas famosa Gran Jefe, el que viva lo verá.
Nunca menos y abrazos
El amigo Sentís, como siempre atento, hoy publica una encuesta de Dicen por demás interesante
http://joserubensentis.blogspot.com.ar/2016/06/a-quien-votaria-hoy.html
y todavía los desbastadores efectos no han culminado por entre otros motivos, el colchón ha subsistido hasta hoy, cuando la recuperación del «tercer trimestre» del año sea otra ilusión que se ha desvanecido, habrá quienes, tal vez en menor proporción que lo de hoy, reconozcan su error, el tema será cercano al 2011.
Nunca menos y abrazos
«Veredes», Esnaola. Se dice «veredes», no «vederes». Y ho hay que agregar «Sancho», porque Cervantes no puso en boca del Quijote tal expresión.
Esnaola… Esnaola… usted no tiene cura.
Y si no es una «oposición irreductible»… ¿de qué se supone que tendríamos que hablar? ¿qué vendría a ser una «oposición reductible»? ¿»apoyar lo bueno y criticar lo malo»?
Se me hace que estos muchachos se confundieron: están ahí para cumplir con las formalidades, no para armar «gabinetes paralelos» (?). Eso es de anglosajones, no de peronistas.
En cualquier caso, Macri les debe el triunfo a De la Sota y a Massa (los números no mienten) y la misión de la hora es sacar de esas huestes cuanto se pueda (empezando por los mal mentados sindicalistas) y volverlo al redil. Y hacer autocrítica sí, pero en serio: lo que saca de quicio a «los vecinos» es la prosperidad insolente de los «punteros» pagos, no los militantes que cantan la marchita ni algún «dirigente» que se pasa de sanata. Lo que saca de quicio a «los vecinos» son las fiestas con los Pimpinela en Mar del Plata mientras que en la salita de primeros auxilios no hay gasa. Lo que saca de quicio a los vecinos no es que el concejal les toque el timbre de la casa sino que desaparezca del barrio ni bien lo eligen… y así podríamos seguir todo el día y también el día de mañana… y el de pasado mañana.
Y no estaría de más «volver a Perón», no para blandir peronómetros sino justamente para lo contrario: rebatir a los que los que los blanden sin tener la menor idea de qué es el peronismo.
He dicho.
Ud tampoco. Por suerte entendió el sentido del mensaje.
[…] Tal vez ustedes ya estén cansados de posteos acerca de la interna del peronismo. Yo lo estoy, y eso que estoy metido en ella. Prometo tratar de variar los temas, subir cosas más serias. Pero me tentó esta nota de INFO135 que encontró Adal, porque además de información sobre las andanzas de Florencio (y su conocida modestia) da una idea sobre la batalla bonaerense que empieza, la madre de todas. Y completa, en cierto modo, el posteo anterior. […]
Es cierto que es muy respetado. Fue un excelente funcionario. Y es intelectualmente brillante, al punto de habernos representado en el país trasandino muy bien. Sus dotes políticas y relacionales son valiosas. Como también es cierto que fue accionista importante de las Farmacias del Dr. Ahorro, noble negocio que aterrizó de la mano de… los genéricos. Sí, Walmart pidió cancha preferencial, pero en todo caso, podría tratarse de un previsible duelo de intereses bien privados.
No hay vírgenes en los partidos políticos, así que hay de dejar de invertir en velas e incienso porque viene siendo claro que no tenemos a quién ponérselas.
Las decisiones de peso tendrán lugar el año entrante. Este año, mientras, los votantes asistiremos a bonitos bailes de máscaras. Tal vez tengamos la suerte de que 2017 alumbre un referente que podamos respetar sin dilaciones.
Bueno, dije que no compro velas pero, la fe, todavía la conservo…
La nueva estrategia de la conducción es lógica. Tenían que hacer algo más sustancial que discutir sobre la decoración de interiores. Reconozco la necesidad estratégica de dar señales panperonistas, pero la jugada tibia no me entusiasma – al menos no en este 2016 -. Se verá más adelante. Porque la noche negra de la Argentina «está en pañales» y son posibles todavía más incontinencias.
Y en cuanto a los pesos pesados, realmente me gustaría que Randazzo se midiera de una bendita vez, para ver si califica como tal o es otro globo aerostático en tiempos de sobreabundancia de corrientes cálidas.
Pero más allá de la intencionalidad maliciosa de la nota que fuerza el pivote sobre los clamorosos ausentes, la asignación de secretarías, de confirmarse, es, verdaderamente, un mazazo a la libido (Rodríguez, Pichetto, Perotti, Magario dibujada en una secretaría igual de holográfica, Espinoza, su titiritero…).
Sí, ya sé, es lo que hay y no puedo dármelas de gourmandise si le he hecho más de un honor al menú «a la sábana». Pero algo bueno encuentro, almenos: Feletti. Un tipo preparado, funcionario todo terreno y hasta donde sé, coherente. Saludos.